domingo, 21 de octubre de 2012


A veces la decisión de irse duele menos que quedarse. Si te quedas es porque esperas algo y ese algo puede no llegar nunca.
Cuando pasamos por ciertas situaciones dolorosas es cuando reaccionamos y nos preguntamos si vale la pena esperar por ese algo, si ese algo va a llegar algún día o estas esperando en vano, desperdiciando ese tiempo valioso.




La melancolía de la tarde me ha ganado el corazón y se nubla de dudas. 
Son esos momentos en que una se pone a reflexionar y alumbra una tormenta. 
Todo es tan tranquilo que el silencio anuncia el ruido de la calma que antecede al huracán. De repente no puedo respirar necesito un poco de libertad 
que te alejes por un tiempo de mi lado
 que me dejes en paz. 
Siempre fue mi manera de ser, 
no me trates de comprender,
 no hay nada que se pueda hacer. 
Soy un poco paranoica lo siento.


No hay comentarios:

Publicar un comentario